La nominación de Pa Negre como candidata española a los Oscars no puede sino ser un triunfo de la industria de cine cuando ésta no pasa precisamente por su mejor momento. La crisis económica y los cambios en los hábitos de consumo de los espectadores ponen en riesgo una industria cinematográfica que nunca ha conseguido despegar por sí misma.
Pa Negre, que tuvo un coste de cuatro millones de euros, ha seguido una carrera imparable desde su estreno en el Festival de San Sebastián en 2010. El año pasado congregó a más de 80.000 espectadores y su recaudación superaba los 870.000 euros. El pasado enero obtenía nueve premios Goya, entre ellos al mejor director y mejor película.
El reconocimiento de los Goya devolvió la cinta a las salas de exhibición y a la atención del gran público. La cifra de espectadores ahora ronda el medio millón y su recaudación supera los 2,6 millones de euros. Su representación en los Oscars la hará volver una vez más a algunas salas.
Es un éxito en un contexto desolador para el cine.... (Seguir leyendo en Economía Digital...)
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